lunes, 21 de agosto de 2017

Capítulo 124 "Mis queridos hijos de puta"

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Don Antonio y los Jesúses
Claro, si uno dice la verdad se queda solo, pensaba mientras volvíamos de Almodovar en el auto de Vigorra. Es lo que pasa cuando una decide lanzarse al camino, acumula experiencias y Jesúses… Ellos en el asiento delantero y yo atrás, escuchándolo todo. Quintero contaba que hace tiempo está escribiendo un libro, Mis queridos hijos de puta, relata anécdotas más bien íntimas de sus entrevistas, será contar la comunicación por dentro. Y que él está de lo más entusiasmado pero su editor le dijo que si lo publicaba sus amigos no le iban a hablar más. Los dos rieron. Entonces sentí que el sueño iba llegando a su fin. Miré por la ventana, los verdes campos del Edén bajo la lluvia. Antonio Gala había quedado atrás y yo había charlado con él. Quintero ya me había aguantado todo el día, me estaba trayendo de vuelta a la civilización, ¿qué más podía pedir esta alma insaciable?

¡Las risotadas de los bailaores! Quintero, Farruco, Canales a las carcajadas me traen de nuevo al presente, a La Carbonería, y ahora hay má gente acá adentro que en la cuenta de twitter de Ariana Grande. Afuera ya no llueve, la entrevista al Farruco terminó y atrás mío el Loco charla con una mujer muy andaluza, cincuentona, de generosas tetas y ademanes exageraos. Es muy lindo verlo en su salsa, en su cotidianidad, como pez en el agua. Da la sensación de que todo el mundo lo quiere mucho. ¡Pero al final el periodista de los silencios habla hasta por los codos! Cada tanto me mira y a mi se me aflojan los pantalones de jean gastado, los únicos que traje porque en el viaje hay que andar liviana, aconsejaba Facundo Cabral.


La gente de filmación levanta equipos y parecería que estamos terminando, pero ya no sé. Tengo hambre y la ropa mojada. Quiero irme a desparramar a la cama y a la vez no quiero despegarme de Él porque ¿y si no lo vuelvo a ver nunca más? Se me estruja la garganta. La señora andaluza escucha atenta, el Loco acaba de contar una anécdota suculenta sobre alguien muy conocido ¡MUY CONOCIDO! ¡CONOCIDÍSIMO! Y fíjese que si a mi se me ocurriese escribirla en el blog salgo hasta en la tapa del diario de chismes llamado El mundo y ahí sí que me vuelvo viral y entonces me daría cuenta de que don Epicuro tenía razón con eso de que la fama sólo produce placeres efímeros y conduce al sufrimiento futuro y-- Y entonces se da vuelta Él y me dice: ojo con lo que escribe tú, xiquilla, porque la amistá e una cosa, pero… Me quedo patitiesa. ¿Amistad dijo? Debo haber oído mal. ¿O será que lo andaluce dicen por decir, amigo, amiga, a cualquier hijo de vecino? ¿O habrá querido decir amistad, lo que se dice amistad? Creo que le escuché a Antonio Gala decir que el amor perfecto es una amistad con momentos eróticos así que a mi me vendría de pelos esta novedad...

Pongo mi mejor cara de niña santa y prometo no escribir ningún disparate. En eso le suena el móvil, se aleja un poco y atiende. Asiente un par de veces y corta la comunicación. Se me queda mirando con cara de velorio. Seguro que le han dicho una verdad. (Capítulo siguiente pinche acá)

Continuara...

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