Valencia, en Sevilla se soporta |
Estàn en dònde menos se los espera |
El poder de los escritores está en decidir el final del libro, le leí no hace tanto a no sé quién, por ello, el último capítulo siempre debe ser el más hermoso... Pero claro, este muchacho solamente escribía, no se le iba interponiendo la acción, la vida delante del puto final todo el tiempo… Me desespera saber que ya no soy dueña de mi vida, haga la peripecia que haga todo está supeditado a ella, a mi madre. Me dan ganas de no volver más a Buenos Aires, de escapar, de que nadie sepa en donde estoy para siempre… Mi padre me dijo que cuanto más quiera escaparme peor me voy a sentir y es un poco así pero yo siento que esto es injusto. ¿Por qué tengo que perder tiempo de mi vida haciéndome cargo de este despelote? Si yo soy joven y linda, me dijo la psicópata evangelista. Y él respondió que esto no es perder tiempo de mi vida, esto es la vida, Marina.
Agonicé un intento de defenderme con un mensaje de voz medio brotado pero mi padre tenía razón, me puse a llorar, a moco tendido, todavía sentada en el escalón de la puerta de la colina. Y acá sigo, sí. Hace como una hora y no me animo a tocar, creo que me voy a ir, creo que sanseacabó todo esto, hasta más vernos. Mi Giralda está dando las cuatro de la tarde, es la hora de la siesta, hace frío y la ropa que tengo (de Ella) no me alcanza, estoy tiritando. ¿Y qué hago con su ropa? ¿Me la llevo a Buenos Aires? ¿La dejo en el bar de la esquina? Se me apaga algo adentro cuando pienso que no voy a volver a ver a la Gitana. Miro hacia la Giralda. Por la angosta callecita vienen caminando dos señores, uno de ellos està de manga corta asì que mis escalofríos son de los nervios me parece. El otro es Él porque así es la cosa, yo me siento y Él aparece, ya lo dijimos. Me agarra el patatús pero ya no puedo escaparme porque me está viendo, de lejos pero me está viendo, porque estoy sentada en el escaloncito de su puerta con la ropa de Ella… Me paro, me sacudo, intento parecer una persona, miro el piso hasta que se acercan lo suficiente. (Sigue)
Continuará...
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